Acabo de enterarme que uno de los mejores programas televisivos de divulgación echará el cierre este fin de semana con la emisión de su último programa. Redes se despide de todos después de 11 años y 448 programas. Pensaba escribir algo al respecto, pero he preferido dejaros uno de los comentarios que ha hecho Requiescat en el blog de Javier Armentia. Espero que no se moleste por reproducirlo, pero expresa mucho mejor que yo lo que pensamos sus seguidores:
Que las parrillas cambian lo sabemos todos, que hay que adaptarse con el tiempo también… Que se decida acabar con el único programa científico-cultural en una cadena de televisión española que ha sabido divulgar, educar e interesar durante años y años a cada vez más espectadores, cambiando y adaptándose a los tiempos, manteniendo y aumentando su audiencia, expandiendo la información más allá de las fronteras del país mediante satélite y aumentando con todo ello el propio prestigio de la cadena… que se decida acabar con todo esto, repito, es un atentado contra la razón humana, carente de toda lógica, un despropósito en cuanto a la calidad de la programación de TVE, y una dolorosa falta de respeto hacia los propios seguidores y no tan seguidores del programa, pues no puede justificarse nunca la continua pérdida de cultura y audaz divulgación en favor de espacios y más espacios de mero entretenimiento falto de contenido para mentes que, a fin de cuentas, se limitarán a ver y asimilar los contenidos que les pongan por delante, creciendo y nutriéndose cuando la cadena les alimente, o vaciándose y estancándose en un triste sedentarismo intelectual cuando la cadena no de otra opción.
Respondan, si no es molestia, qué nuevo espacio vendrá a sustituir a REDES a tan “disputadas” horas de la madrugada que valga ese elevado precio. De seguro será de una calidad divulgativa sin parangón en la televisión, una genialidad con la que sorprender a la competencia y espectadores, a propios y extraños. Si no, no cabe en la lógica de nadie. ¿O es acaso una cuestión económica? ¿Qué nuevo proyecto pagaremos los contribuyentes que tanto nos conviene y que tanto bien nos hará a la valía del alma o la fortaleza de la razón? Porque igual que en una familia el presupuesto se invierte en ir cubriendo primero los bienes necesarios para después cubrir el ocio, y se escogen con sumo cuidado los alimentos que mejor nutrirán y llevarán el desarrollo de los más jóvenes, o los no tanto, hacia el mejor de los futuros, así, digo, nuestro dinero financia los contenidos que mejor deberían convenirnos y satisfacer al más amplio de los públicos, pero también se exige a quien nos alimenta que muestre un espíritu de progreso, atención a la población y respeto a sus espectadores.
¿Qué sociedad es la que imaginan cuando traen este nuevo programa o suprimen aquel otro? ¿Qué tipo de personas tienen como objetivo satisfacer? ¿Qué conversaciones esperan que se encuentre en las calles cuando a la mañana de un lunes y agotadas las experiencias personales lo único que hallemos en el espacio de las experiencias colectivas sea la jornada de fútbol, las faenas del toreo, la película del fin de semana, la motivación por invadir intimidades que nos trae el famoseo, y la tristeza de los informativos? ¿Dónde quedará el progreso, la mejoría, la lucha y motivación por el futuro social, político y científico?
Los contenidos de hoy son las opiniones de mañana. Y con estos contenidos cada vez hay menos espacio para el desarrollo personal. Puede que no sea interés de la mayoría, pero es injusto que en una cadena pública no se deje ni tan siquiera un único espacio, siquiera semanal, siquiera de madrugada, en el que poder excusarse cuando les pregunten ¿qué ofrecen en exclusiva de lo que puedan sentirse orgullosos? Cuando supriman REDES créanme que no les quedará nada con lo que responder. Todos y cada uno de los contenidos que ofrezcan existen en las principales cadenas nacionales por duplicado, triplicado o quintuplicado. Sólo cambia el nombre y el presentador. Cuando supriman REDES no les quedará más que la ausencia de una gran disculpa que nos deberán y deberán en general a todos los que alguna vez hemos pensado que la televisión puede ser algo más que adormecimiento para el espíritu y conformismo para la mente.
Me despido esperando que se recapacite y se aprenda a ver más allá de las cifras.
Email a enviar a RTVE para que no quiten el programa.
Blog de Punset.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Todos los comentarios son responsabilidad únicamente de sus autores y no refleja necesariamente el punto de vista de este sitio.
NO insultes a nadie.