Las cinco ruedas que aun giran en el rover Spirit de la NASA han estado resbalando continuamente en el blando suelo que se ha encontrado en los últimos intentos por moverse, enterrando las ruedas hasta la mitad en el terreno. El equipo de ingenieros y científicos del rover han suspendido los desplazamientos de Spirit temporalmente mientras estudian el terreno alrededor del rover y planean pruebas de simulación con el rover que tienen en el JPL.
Imagen tomada en el Sol 1.899 del 6 de mayo de 2.009, donde se observa a la izquierda como ha quedado de enterrada una rueda al intentar salir de un terreno blando durante las dos últimas semanas. Imagen: NASA/JPL-Caltech
"Spirit está en una situación muy dificil", dijo el lunes John Callas, director del proyecto de Spirit y Opportunity. "Estamos procediendo metódicamente y con cuidado. Podrían pasar semanas antes de que intentemos mover a Spirit de nuevo. Mientras tanto, estaremos usando los instrumentos científicos de Spirit para aprender más sobre las propiedades físicas del suelo que nos está dando los problemas".
Tanto Spirit como Opportunity han funcionado 5 años más que las misiones previstas originalmente de tres meses en Marte y han conducido mucho más lejos de lo que fueron diseñadas. El equipo del rover ha diseñado diversas formas de sortear los problemas de envejecimiento de ambos rovers.
Spirit ha estado conduciendo en el sentido contrario de las agujas del reloj desde el norte hasta el sur alrededor de una baja planicie llamada "Home Plate" desde hace dos meses. El rover ha progresado 122 metros en esa ruta antes de llegar a su posición actual.
La pasada semana, el hundimiento de las ruedas de Spirit elevó las preocupaciones de que la panza del rover pudiera estar lo bastante baja como para que las rocas tocaran el chasis, lo que haría la situación más complicada. La rueda delantera derecha de Spirit se paró hace ya tres años. Conducir con sólo cinco ruedas motorizadas mientras se arrastra una de ellas, añade problemas a la situación.
Por suerte, en tres ocasiones el pasado mes, el viento ha eliminado buena parte del polvo acumulado en los paneles solares de Spirit, lo que incrementa la capacidad del rover para generar electricidad. "La mejora en la situación de energía nos ha dado tiempo", dice Callas. "Usaremos ese tiempo para planificar cuidadosamente los próximos pasos. Sabemos que las tormentas de polvo volverán en cualquier momento, aunque actualmente los cielos están despejados".
Los problemas de comportamiento en Spirit comenzaron a principios de abril, con episodios de amnesia, reinicios del ordenador y fallos al despertarse para las sesiones de comunicación, no se han repetido en las pasadas tres semanas, aunque las investigaciones aun tienen que aclarar las causas iniciales.
· Noticia original JPL
Imagen actualizada por la USNO
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